lunes, 9 de enero de 2012

Acondicionamiento físico para el nuevo año

¡Saludos a tod@s! ¡Feliz año 2012!
Este domingo 8 doy por concluida, para mí, la maratón Guadalupe-Reyes, que en esta ocasión estuvo más brutal pues se combinaron varios factores (paseos, visitas, onomásticos) que, aunados a los típicos propios de la temporada (día 12, vacaciones -esta vez, forzadas :( -, posadas, megacena de Nochebuena, megacena de año viejo, rosca de Reyes), me dejaron el peso de mi hermoso puerco cuerpo en alrededor de 105 kg.

Propósito de año nuevo: ir en búsqueda del peso ideal, del físico perdido, de la condición física óptima... yeah, sure...
No soy de hacer "propósitos de año nuevo" porque me conozco (creo)... pero esta vez es justo y necesario, pues ahora sí me siento pesado e hinchado, como vil embutido... mi pancita de acero cumplió una vez más su cometido decembrino, triturando pavo, romeritos, tamales, buñuelos, bacalaos, pastelillos, lomo y costillitas a la BBQ, roscas de Reyes, dulces, ponches, atoles, sidras, tornillos, tuercas y rondanas jajaja... sin siquiera un retortijón...
De vuelta a la realidad: ahora con la misma enjundia que anduve de fiestero, a ponerse las pilas para lograr una condición física decente, a recuperarse el resto del año hasta la próxima maratón. ¡Ahora sí, a moverse!

Y siendo yo un hombre de ciencia (infusa), maistro de todo experto de nada, me he propuesto hacer un programa de acondicionamiento basado en mi (poca) mundanal experiencia, usando de conejillo de Indias al especimen que tengo más a la mano: yo mero... sirvan las próximas entradas de este blog como una bitácora de mis elucubraciones y prácticas al respecto, sobre lo que (no) hacer para que, con perseverancia y optimismo, pero más con método, logre deshacerme de tanto lastre y verme más bello de lo que estoy.
Mens sana in corpore sano...

No hay comentarios:

Publicar un comentario